vine sábado en la mañana. los desayunos se ven todos ricos que uno no sabe ni cuál escoger. me fui por la Shakshuka israelí: el sabor increíble, fresco. todos los desayunos vienen acompañados de café, unos dulces pequeños para degustar y un jugo pequeño. muy completo. atención excelente. muy pendientes. ambiente tranquilo. además en la pastelería pedí un pie de limon pequeño que estaba increíble