El servicio fue increíble. Éramos un grupo bastante grande y aún así no hubo dificultad alguna. La mesera nos ayudó en todo lo posible y nos recomendó el pork belly que estaba simplemente exquisito.

La comida es de ensueño. Se nota la dedicación que le han aplicado a diseñar un pequeño menú excelentemente balanceado. El chef, Pablo, fue muy amable. Pedimos las recomendaciones del chef y no decepcionaron. El pork belly y el tiradito son estrellas del menú.