Restaurante Giratorio

Había oído de este lugar cada quien cuenta cómo le va yo fui a su cena de fin de año y espectacular la vista el vino y su atención, por ir temprano nos atendieron bien solo unos vegetales tardaron en llegar pero todo bien para nosotras; unos sabores tan variados yo probe mar y tierra pero el salmón con papita de camote muy bueno y sus postres exquisitos!! me quede con un poco de sed y me hubiera gustado refill de bebida natural pero muy recomendado para una pedida, aniversario o fin de año pero de preferencia al atardecer. Eso si ellos piden un consumo mínimo de 150 por persona y si mandan confirmación son precisos en ese sentido.

Un lugar tranquilo con excelente vista y experiencia de ir girando despacio con buena comida y buen servicio algo lento pero buena atención! Muy buenas carnes 🥩💯

La vista es impresionante, como experiencia podría recomendarlo, lo que no me gustó fue la comida, no era fea, pero para el precio era muy simple, fuimos dos personas y compartimos la entra y el postre, ninguno consumió licor y fueron más de Q.600, hay parqueo en el lugar, el restaurante da cortesía de una hora, después de eso hay que pagar. Interesante para la experiencia, pero no por la comida.

Una experiencia diferente, el menú no es variado, pero definitivamente la vista compensa todo, es la razón principal del atractivo del lugar. No regresaría a comer allí pero sí por unas bebidas, definitivamente!:)

El restaurante tiene mal olor a comida, mariscos, parecía olor de un restaurante viejo. El movimiento giratorio, no es imperceptible, por el contrario se siente pequeños empujones poco agradable, ni el servicio ni la calidad de la comida está acorde con el precio que pagamos. La vista de la ciudad de guatemala es muy linda sobre todo de día.